• Defensa Personal

    Defensa Personal

    En el ámbito civil se intenta reducir al adversario de manera segura y sin provocar daños desmedidos dada la responsabilidad civil de la acción defensiva cuando se exceden los límites de la legítima defensa. La defensa personal se basa en los fundamentos de algunos deportes o artes marciales. Es por ello, que técnicas básicas como los golpes únicos (aquellos que se realizan contra el oponente con una zona especifica de nuestro cuerpo) como el uso de la palma de la mano, los nudillos y los dedos en zonas blandas o rodillazos, pasando además por técnicas más profesionales como diferentes tipos de patadas, y ya, aun más avanzadas como desequilibrios o inmovilizaciones (las cuales se suelen usar en defensa personal policial o en modalidades deportivas como el kárate) son las aplicaciones en las que comprende la defensa personal.

    También existen elementos como los bastones de electrochoques y los conocidos «gas pimienta» que entran a formar parte de los elementos permitidos por la ley para salvaguardar vidas humanas.

    En el ámbito militar se utilizan técnicas con mayor poder ofensivo y letal valiéndose incluso de las armas de dotación. En este caso, en algunos países, ya no se habla de defensa personal sino de «combate cuerpo a cuerpo» ya que el objetivo no es solo defensivo sino también ofensivo y letal.